miércoles, 31 de agosto de 2011

EL VIAJE

No ha sido largo: Afortunadamente en la libreria de la terminal B encontré un libro de mi siempre apreciado Terry Pratchett y el vuelo entre las cabezadas y la lectura se me paso en un santiamén.


Luego de comprobar en el aeropuerto de Katowice que los hay más pequeños que el de Girona, cogí un minibus que nos llevó a ocho personas hasta Cracovia. Las dos que tenia detrás -un español y una polaca que hablaba el castellano perfectamente- tuvieron una conversación interesante sobre la que intentaba no prestar atención, pero hablaban a menos de sesenta centímetros de mi oreja...  Cuando una hora y media más tarde empezó a aparecer la ciudad en la que viviré estos meses, perdí el hilo....


El último trayecto, de la estación de autobuses a la Residencia Piast, cinco minutos en Taxi. Llegué cayendo la noche (las 19.30 hora local de aquí y local de allí) y dí por concluido el traslado y por iniciado, el viaje...

2 comentarios:

  1. Benja, las velas son mu, pero que mu xulàh.... pero atentan contra la comprensión de la prosa expuesta.
    Que tengas mucha suerte y hasta pronto!!!!

    Y no te olvides que Tesfiño y Tepetale...

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  2. Hay por aquí un compi de Hungría que tiene un vocabulario polaco de lo más escogido... Mira por donde ya tengo algo que enseñarle yo! :)

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